Un flyer es un soporte publicitario que apoya una promoción o refuerza la imagen de una marca. A veces podemos pensar que los flyers ya no están de moda o no son útiles, y es un gran error. La publicidad clásica y el buzoneo siguen siendo grandes estrategias de publicidad para dar a conocer un nuevo negocio en el barrio o en mi ciudad y para promocionar productos y darlos a conocer. Un folleto o flyer es un producto relativamente barato que te permitirá llegar a mucha audiencia y, si está bien hecho, lo leerá mucha gente aumentando el conocimiento de tu marca y tus ventas.
Ahora te damos algunas pistas sobre qué poner en tu flyer publicitario para que esté bien hecho y puedas alcanzar el éxito.
Normalmente, hay dos formatos para hacer tu folleto:
- Díptico, folio doblado por la mitad. En las partes externas se suele imprimir el logotipo de la empresa y el contacto y en las caras interiores figura toda la información.
- El otro formato se llama Tríptico y es igual que el díptico pero partido en tres partes (y no doblado en dos). Como dispone de más espacio, puede contener más información y se usa como soporte informativo más que como soporte publicitario.
Al empezar a plantear un folleto es muy importante tener un objetivo claro, saber qué vamos a promocionar y qué queremos destacar. Lo más efectivo es que cada folleto tenga un solo objetivo.
Otro tema importante es a quién vamos a darle nuestro folleto informativo. Debemos tener claro nuestro público, a quién le va a interesar nuestra información y dárselo a las personas que pueden ser futuros clientes nuestros.
Para diseñar un buen folleto informativo hay que pensar que se van a leer de arriba abajo y de izquierda a derecha. La información más destacada debe ir en la parte de arriba porque enseguida veremos qué información tiene y de qué va ese folleto.
Debemos destacar lo importante y que quede bien claro qué promocionamos y qué ofrecemos o si hay descuentos, vales, cupones… y esto se debe ver bien, hay que ponerlo en letra grande, siempre siguiendo un buen diseño y siendo coherentes.
En 2 o 3 segundos debemos dejar claro el mensaje, con un solo vistazo ya se debe saber de qué hablamos y qué ofrece ese flyer. Y como una imagen vale más que mil palabras, debemos escoger imágenes de calidad que nos ayuden a conseguir un diseño impecable y espectacular que de una muy buena imagen de nuestro proyecto y lo haga atractivo e interesante.
Acompañando a este un buen diseño debemos poner un mensaje potente que despierte la curiosidad y el interés. Al primer vistazo debemos captar la atención de quién nos lee, debemos “enamorarle” y que tenga ganas de saber más y de venir a comprar los productos que le estamos ofreciendo. Además, todo el texto del folleto junto al diseño y su imagen debe ser coherente y tener una conexión con lo que estamos promocionando. Así tendremos éxito seguro.